Voluntariado Apostolado de la Palabra

Las personas dolidas por heridas familiares profundas, frecuentemente se abandonan en ese estado y ya no saben salir de su situación, pues se encuentran realmente mal y solas en ese camino desértico. Pues esas heridas, aunque sean del pasado, siguen doliendo durante años si no se curan. Cada vez que recuerdan la injusticia o la venganza, se abre de nuevo la herida y el dolor no cesa.

Durante 3 domingos se han realizado en Casa de María Reina de la Paz unos talleres participativos sobre la familia. Se trabajan personalmente temas como la gratitud, las libertades, las decisiones, el fracaso y el perdón, entre otros.

Ha sido para nosotros una inmensa alegría saber que algunas personas han conseguido curar sus heridas y rehacer su vida, gracias a la ayuda de Casa de María Reina de la Paz y a todos sus voluntarios.

Testimonio anónimo